89 En respuesta, Sa'id envió a un grupo de sus confidentes junto con un grupo de lugareños de Quiloa a su padre para entregarle el mensaje de los lugareños de Quiloa. Hassan bin Yarik escuchó a los enviados y verificó que el asunto en Quiloa era como lo describieron. Luego ordenó el asesinato de los mensajeros de Quiloa e hizo preparativos inmediatos para atacar Quiloa esa misma noche. La noticia llegó a Quiloa, y los lugareños acudieron allí en gran número, con armas y provisiones, para defender su tierra. Por la mañana vieron acercarse los barcos de Hassan bin Yarik con combatientes y soldados a bordo. Como resultado, estalló una feroz guerra en la que muchas personas fueron asesinadas, heridas y capturadas.
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