61 Le fue dicho que aquí en este Santo Oficio lo que se pretende es saber verdad y remediar las almas de los que han cometido algún error contra nuestra fe Católica, y que si se entendiese que este confesante u otra persona alguna decía alguna mentira sería castigado con todo rigor, y así se le amonesta y requiere de parte de Jesucristo que diga verdad pura y no otra cosa y descargue en todo su conciencia. (Nota lateral: que después que está en tierra de cristianos no ha sido moro) Dijo que cuando estaba en tierra de moros era este confesante moro, pero que después que se bautizó y está en esta tierra nunca ha sido moro y que morirá en la fe de Jesucristo. Preguntado si después que salió de este Santo Oficio enfiado Hoja 69 Si comunicó con alguna persona o personas lo que este Santo Oficio había dicho y confesado. Dijo que no, que este confesante estaba muy malo y decían que era del mal de San Lázaro y que en su casa ni fuera de ella ninguno se osaba llegar a él. (Nota lateral: Que no le ha persuadido nadie que revoque) Preguntado si alguna persona o personas le aconsejaron y persuadieron de que revocase todo lo que había dicho en este Santo Oficio de sí y de otras personas que declaró. Dio que no. Le fue dicho que si esto es verdad que fue la causa que le movió a revocar las confesiones que este Santo Oficio tenía hecho. Dijo que la causa fue que estando en la cárcel de este Santo Oficio que aquel hombre de Málaga de quien tiene dicho, estando ambos a dos dentro de la cárcel le dijo “mira Martín si tú no dices que has sido moro, nunca saldrás de la cárcel”, y por esto lo dijo. Le fue dicho que si él no había sido moro que mejor fuera estar en la cárcel dos o tres años hasta que su negocio se determinara, que no levantase testimonio sin irse al infierno. Dijo que él tiene dicho la verdad es que si quieren que él diga mentira que la dirá y que por la de Jesucristo ha de morir.
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